¿Qué es el pterigium?
El pterigium es una lesión benigna de la superficie ocular, que se caracteriza por la invasión de la cornea por conjuntiva y vasos sanguíneos.
Se debe a una alteración del limbo esclero-corneal. El limbo es una estructura localizada entre la esclera (parte blanca del ojo) y la cornea, donde se localizan las células madre de la cornea.
La cornea para ser completamente transparente necesita no tener vasos sanguíneos y es por el limbo por donde se nutre de células, el limbo además actúa de freno para que la conjuntiva no invada la cornea.
Pues bien, en el caso del pterigium existe una alteración de ésta estructura que deja de actuar como límite y entonces la conjuntiva y los vasos sanguíneos comienzan a crecer e invadir la cornea.
¿Por qué se produce?
Realmente no se sabe la causa concreta, aunque si existen múltiples estudios que lo relacionan tanto con la exposición solar crónica como con la predisposición genética. Lo que hace que éste proceso sea más frecuente en pacientes de centro y sur de América.
¿Qué síntomas provoca?
En primer lugar el síntoma más característico, es la aparición de una especie de tejido o carnosidad que comienza a crecer desde la conjuntiva hacia la esclera.
La localización más típica es el área nasal de ambos ojos.
Es muy frecuente el picor, ardor, enrojecimiento y escozor.
El pterigium tiene tendencia a crecer, si llega a afectar el eje visual puede provocar astigmatismo irregular y pérdida de visión por falta de opacidad de la cornea.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico es clínico, una simple exploración con lámpara de hendidura permite establecer el diagnóstico, no son necesarias más pruebas complementarias.
¿Existe alguna forma de prevenirlo?
Realmente no existe una forma efectiva de prevenirlo, lo que sí ha demostrado gran importancia es la protección con gafas de sol.
¿Cuál es el tratamiento del pterigium?
El único tratamiento eficaz es la resección quirúrgica.
Se pueden utilizar colirios de antinflamatorio para disminuir el enrojecimiento y lágrimas artificiales para aliviar los síntomas de picor, escozor y ardor.
Se indica un tratamiento quirúrgico cuando el pterigium es síntomático y/o está creciendo de forma progresiva hace el eje de visión.
La cirugía es sencilla, es extraocular, lo que quiere decir que no se involucran estructuras vitales de la visión. Se realiza mediante anestesia local y dura entre 15-20 minutos.
Además de resecar el pterigium, los oftalmólogos de IPOOM, realizamos en el mismo acto quirúrgico un novedoso procedimiento consistente en la colocación de un autoinjerto de conjuntiva y limbo de una localización sana en el lecho donde se ha extirpado el pterigium.
De esta forma reducimos al máximo tanto las molestias postoperatorias como la posibilidad de que vuelva a crecer de nuevo la lesión.
¿Cómo es el postoperatorio?
Habitualmente recomendamos ocluir el ojo durante 24 horas y a partir de entonces comenzar con un tratamiento tópico en forma de colirio o pomada con una combinación de antibiótico y corticoide.
Durante una semana son normales los síntomas de enrojecimiento, escozor y sobre todo sensación de arenilla en el ojo, por lo que es muy importante utilizar un tiempo lágrimas artificiales.
