Las miodesopsias, más habitualmente llamadas “moscas volantes” o bien «cuerpos flotantes», son un pequeño defecto de los ojos en el cual aparecen puntos o manchas con diversos tamaños, espesores y formas en el campo visual de la persona que lo padece.
A pesar de que los síntomas preocupan en muchos casos a la persona, es un hecho muy frecuente. Según diversos estudios se calcula que aproximadamente siete de cada diez personas lo sufren en algún momento, pero hay que saber que no son una patología grave, tampoco van a comprometer la visión, ni tampoco suponen una posible enfermedad importante a largo plazo, lo único es que resultan algo molestas.
Características
Hay algunas características propias que las diferencian de otras posibles patologías graves:
- Las manchas no están quietas, sino que se mueven, parece “como si flotasen”.
- Se aprecian especialmente cuando miramos sobre fondos iluminados y brillantes, como puede ser la pantalla del ordenador, el cielo etc.
- Es más habitual que aparezca en personas mayores y en personas miopes con mucha graduación. Aparecen más frecuentemente en situaciones de ansiedad, estrés y cansancio.
¿Por que aparecen?
Pueden aparecer cuando hay algunos cambios en el humor vítreo (líquido gelatinoso localizado entre el cristalino y la retina). Éstos cambios pueden aparecer por diferentes motivos como por ejemplo la miopía, la diabetes, el propio envejecimiento etc., que forman opacidades o condensaciones.
Al pasar la luz por estas condensaciones e irregularidades del humor vítreo, aparecen pequeñas sombras sobre la retina.
Tratamiento
No hay un tratamiento efectivo para hacer desaparecerlas, ni con medicamentos ni quirúrgicamente. Si es verdad que hay una técnica conocida como vitrectomía, en la cual se extrae el humor vítreo y se reemplaza con una solución salina. Pero esta intervención puede tener efectos secundarios importantes, como desprendimiento de retina o cataratas entre otros, por lo que no está recomendada más que en casos muy concretos.
La gran mayoría de las personas se acostumbran a esta molestia, de forma que apenas las aprecian. Incluso pueden desaparecer de forma espontánea en muchos casos.
¿Cuando es preciso acudir al oftalmólogo?
Sabemos que son benignas y rara vez suponer un problema importante. Aunque sí que hay algunas señales importantes relacionadas, que pueden requerir la intervención de un oftalmólogo:
- Cuando aparecen de forma repentina.
- Cuando además de las moscas volantes hay destellos de luz.
- Cuando estas manchas no se mueven.
- Cuando cambian de tamaño de forma importante.
- Si observamos otros síntomas como puede ser una pérdida de visión lateral.
En cualquiera de estos casos recomendamos acudir al especialista para que nos realicen un examen del fondo de ojo. De este modo el oftalmólogo podrá evaluar la retina y descartar alguna patología grave como desprendimiento de retina, hemorragia interna, etc.
